Las Grandes Bienaventuranzas del siglo XXI
Bienaventurados los pobres en Espíritu ... en su sed de felicidad y armonía .. ellos anhelarán y tendrán hambre de emancipación .. de liberación .. y de redención.
Bienaventurados los que han fracasado en el mundo .. porque el Espíritu del Padre ha cerrado sus puertas exteriores sólo para abrir de par en par las puertas interiores de Su Reino de Consciencia.
Bienaventurados los mansos y rendidos al saber que ellos, por sí mismos en su humanidad, no pueden hacer nada... porque Suyo es el Reino de toda Gloria sobre su sacrificio y abnegación.
Bienaventurados los verdaderos hijos del Padre Hijo Espíritu Uno... porque conocen su propio lugar en los Universos... y a través de su correcta relación con Dios, serán renovados... regenerados... refrescados... y redimidos en la Vestidura Sin Costuras de la Iluminación.
Bienaventurados los que creen sin ver... porque su fe florecerá en Su Divina Perspicacia, y su carácter crecerá hasta la madurez y la sabiduría en las verdades eternas... las actitudes de las virtudes piadosas.
Bienaventurados aquellos que han respondido a la llamada de libertad y dominio sobre las frecuencias mundanas... porque se librarán permanentemente de todas las glorias vanas y de la plaga de la separación vibracional.
Bienaventurados los que tienen hambre de encontrar a Dios y asemejarse a Él; porque serán elevados y renovados... madurarán y se refinarán en la luz mayor... la vida más abundante.
Bienaventurados los humildes que dan crédito de todo bien al Padre .. y encontrando sus disciplinas internas y obediencias para adherirse a la ley de la existencia para así transfigurar y tomar cuentas de sus malos caminos....
Bienaventurados los responsables y obedientes .. los cooperativos y contemplativos; porque su recompensa será la redención .. que se les perdone todo engaño humillante e insatisfacción temporal derivada de la excesiva implicación en el mundo.
Bienaventurados los fieles y los confiados; porque no han traicionado su confianza con el Padre, y entrarán al Reino de Su Soberanía y participarán de la realización de Su Supremacía.
Alegraos y regocijaos, porque grande es vuestra recompensa en el cielo de los cielos a medida que ascendéis progresivamente hacia el interior, porque así persiguieron a los profetas que os precedieron.
Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? ya no sirve para nada, sino para ser echada fuera y pisoteada por los hombres.
Vosotros sois la luz del mundo. Una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni las mujeres ni los hombres encienden una vela y la ponen debajo de un celemín, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en la casa.
De cierto os exhorto... a que hagáis brillar vuestra luz delante de todas las criaturas, grandes y pequeñas, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
No penséis que he venido otra vez a destruir la Ley o los Profetas: No he venido para destruir, sino para cumplir.
Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni un punto ni una coma pasará desde la ley, hasta que todo se haya cumplido.
Cualquiera, pues, que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así lo enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado al reino de los cielos; mas cualquiera que los cumpla y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos.
Porque os digo que si vuestra rectitud no fuere mayor que la de los pastores y ministros de las religiones evolucionarias, en ningún caso entraréis al reino de los cielos.
Habéis oído que fue dicho por los de antaño: No matarás; y quienquiera que mate estará en peligro de ser juzgado; pero yo os digo que quienquiera que se enoje con su hermano sin causa estará en peligro de ser juzgado; y quienquiera que juzgue a su hermano y hermana estará en peligro de incumplir su propia existencia en el Amor del Padre.
Por lo tanto, si traéis vuestro don de consciencia, atención y apreciación hacia el altar de la eternidad con la Vida Ajustadora del Paraíso, estaréis honrando a Dios nuestro Padre... reconociendo su autoridad de absoluta e inquebrantable bondad... y ampliando así su gracia para que encontréis vuestra Libertad Eterna.
Christ Michael of Nebadon
The Greater Beatitudes of the 21st Century
Blessed are the poor in Spirit … in their thirst for happiness and harmony .. they shall crave and hunger for emancipation .. for liberation .. and for redemption.
Blessed are those who have failed in the world .. for the Spirit of the Father has closed their outer doors only to open wide the inner doorways of His Kingdom of Consciousness.
Blessed are the meek and surrendered in knowing that they, of themselves in their humanity, can do nothing .. for theirs is the Kingdom of all Glory upon their sacrifice and selflessness.
Blessed are the true children of the One Father Son Spirit .. for they know their own place in the Universes .. and through their right relationship to God, they shall become renewed .. regenerated .. refreshed .. and redeemed unto the Seamless Garment of Illumination.
Blessed are those who believe without seeing .. for their faith shall blossom into His Divine Insight, and their character shall become grown to maturity and wisdom in the eternal verities .. the be attitudes of godly virtues.
Blessed are those who have answered the call for freedom and mastery over the worldly frequencies… for they shall permanently rid themselves of all vain glories and the plague of vibrational separation.
Blessed are those who hunger to find God and become alike unto Him; for they shall be raised and renewed … they will become matured and refined into the greater light .. the life more abundant.
Blessed are the humbled ones who give credit for all good to the Father .. and finding their inner disciplines and obediences to adhere to the law of existence to so transfigure and take accounting for their evil ways…
Blessed are the accountable and obedient .. the cooperative and contemplative; for their reward shall be redemption .. that they are forgiven for all humiliating deceit and temporal dissatisfaction stemming from overinvolvement in the world.
Blessed are the faithful and the trusting; for they have not betrayed their trust with the Father, and they will enter the Kingdom of His Sovereignty and partake of the realization of His Supremacy.
Rejoice, and be exceeding glad: for great is your reward in the heaven of heavens as you progressively ascend inwards: for so persecuted they the prophets which were before you.
Ye are the salt of the earth; but if the salt have lost his savor, wherewith shall it be salted? it is thenceforth good for nothing, but to be cast out, and to be trodden under foot of men.
Ye are the light of the world. A city that is set on a hill cannot be hid. Neither do women and men light a candle, and put it under a bushel, but on a candlestick; and it giveth light unto all that are in the house.
Verily do I encourage thee .. to let your light so shine before all creatures great and small, that they may see your good works, and glorify your Father which is in heaven.
Think not that I am come once again to destroy the law, or the prophets: I am not come to destroy, but to fulfill.
For verily I say unto you, Till heaven and earth pass, one jot or one tittle shall in no wise pass from the law, till all be fulfilled.
Whosoever therefore shall break one of these least commandments, and shall teach men so, he shall be called the least in the kingdom of heaven: but whosoever shall do and teach them, the same shall be called great in the kingdom of heaven.
For I say unto you, That except your righteousness shall exceed the righteousness of the pastors and ministers of the evolutionary religions, ye shall in no case enter into the kingdom of heaven.
Ye have heard that it was said by them of old time, Thou shalt not kill; and whosoever shall kill shall be in danger of the judgment: but I say unto you, That whosoever is angry with his brother without a cause shall be in danger of the judgment: and whosoever shall judge his brother and sister shall be in danger of defaulting upon their own existence in the Father's Love.
Therefore if thou bring thy gift of awareness and attention and appreciation unto the altar of eternity with the Adjuster Life of Paradise, so shall you be honoring God our Father .. acknowledging his authority of absoluteness and unwavering goodness .. and so amplifying his grace that ye shall findeth your Everlasting Freedom.
Christ Michael of Nebadon
